Soy su Luna sin lobo
Heidi Judith
Los dedos de Ethan seguían frotando mi clítoris, mientras su pene saltaba dentro de mi cuerpo. Cada articulación de mi cuerpo está dolorida y gritando por el próximo orgasmo. Demasiado rápido, siento esa tensión eléctrica apretándose más, una presión creciente que amenaza con destrozarme. Mis caderas se levantan involuntariamente, instándolo a continuar su exploración, rogando en silencio por la liberación que estoy tan cerca de saborear.
Ethan también emitía profundos rugidos en mi oído.
—Mal...
Ethan también emitía profundos rugidos en mi oído.
—Mal...