La loba solitaria
Lindsey Marie
—Creo... creo que voy a correrme! —Las palabras salieron como una confesión a medio susurro, cargadas con una mezcla inusual de vulnerabilidad y anticipación.
Mientras las palabras escapaban de mi garganta, alimentando aún más el aura erótica en la habitación, Shane, aparentemente imperturbable, se empujó aún más dentro de mí. Se sentía como una invasión placentera, una transgresión íntima que enviaba oleadas de calor emocionante a través de mis venas. Sus movimientos rápidos y rítmicos hacían ...
Mientras las palabras escapaban de mi garganta, alimentando aún más el aura erótica en la habitación, Shane, aparentemente imperturbable, se empujó aún más dentro de mí. Se sentía como una invasión placentera, una transgresión íntima que enviaba oleadas de calor emocionante a través de mis venas. Sus movimientos rápidos y rítmicos hacían ...