Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO CIENTO NOVENTA Y SIETE

Arrojé a otro vampiro, agarrando a otro con furia y decapitándole la cabeza. No hacía mucha diferencia, ya que mis poderes para matar vampiros parecían haber tomado un descanso, cada uno de estos cabrones se levantaba más rápido de lo habitual.

—¡Reed! —grité en medio del caos.

—Estoy un poco ocup...