Read with BonusRead with Bonus

42. Lágrimas de mi enemigo

Toco mi identificación en el robot de la entrada de la oficina, y de inmediato se ilumina diciendo: “Bienvenida Emara Stone. ¡Wow! Tu piel se ve increíble hoy. ¿Usaste algún suero nuevo?”

Giro la cabeza lentamente hacia el robot, fulminando con la mirada a ese montón de chatarra sin alma con mis ...