Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 95: Pobre cosita

Las lágrimas dejaron de fluir.

Miré rápidamente alrededor, confirmando que el pasillo estaba vacío excepto por una enfermera ocupada al fondo que no me prestaba atención. Moviéndome con propósito, caminé hacia una alcoba de mantenimiento que había visto antes—una pequeña área empotrada parcialmente...