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Capítulo 2:

Aura pestañeó un par de veces.

¿le dijo niña?, ¿Qué demonios se creía?, ella estaba por cumplir diecinueve años, casi era una adulta, abrió la boca para replicar, pero estaba tan molesta e indignada que no pudo decir nada y solo lo vio partir, el estúpido sujeto ni siquiera la volteó a ver.

— Aura, ¿estás bien? — preguntó Kristel cuidadosamente, ella había visto toda la escena y escuchado eso último, honestamente, luchaba por no reír.

—M-me… ¡Me llamó niña! — dijo Aura volteando a verla.

Y Kristel no pudo más, estalló en una carcajada.

—¿De qué demonios te ríes? — cuestiono la cobriza que, a la molestia inicial, se le agregó esta.

Tras varios segundos Kristel todavía lucía una sonrisa, pero negaba con la cabeza.

—¿Qué? ¿No le darás la razón o sí? — cuestiono Aura y la vio con reproche.

—Bueno… — decía moderando la voz.

—¡Kristel! — regañó con indignación la cobriza.

—¡Ah, vamos Aura! — intentó disolver su molestia. — Tú tienes la culpa — dijo Kristel intentando no reír. — Pero mira cómo te vistes, no es extraño que te llamarán niña. — recalcó Kristel señalando el atuendo de la chica.

La cobriza dio un pequeño respingo y se trabajó.

— ¿Qué tiene de malo mi ropa? — preguntó ahora nerviosa.

—¡Por Dios!, ¿Lo dices en serio Aura? — cuestionó ahora preocupada la castaña. — ¡Te vistes como una niña! Y lo diré, eso no tiene nada de malo, sin embargo, habrá personas como ese imbécil que no dudarán en hacerte burla por ello. — dijo Kristel con seriedad.

— No es cierto… — respondió Aura algo dolida.

Kristel ladeó la cabeza en desaprobación.

— Vistes como cuando tenías doce… vestiditos, saquitos, zapatitos de piso…te ves realmente adorable, pero no como una adulta. — respondió Kristel con seriedad.

—¿Y eso qué tiene de malo? a mí me gusta — respondió Aura con sentimiento.

—¡Por Dios! —  volvió a decir Kristel exasperada. —¡Luces como si tu mamá te vistiera! Y repito, no tiene nada de malo, sin embargo, habrá quien te lo hará notar como justo paso ahora. — dijo Kristel negando.

—Claro que no… — respondió en voz baja Aura… aunque, la mayoría de la ropa que tenía, efectivamente, se la había regalado su mamá.

Aura frunció el ceño.

—¿Crees que necesites un nuevo guardarropa? — cuestionó Aura suplicando una respuesta negativa.

—Olvídalo ya. — dijo Kristel enternecida. — Y no le hagas caso, ese sujeto es un insufrible — dijo Kristel recordándole por qué inició toda esa charla.

—¿Lo conoces? — preguntó ligeramente sorprendida la cobriza

— Su nombre es Cedric Blackwell, y es un cabrón arrogante. — dijo la castaña con molestia.

—Eso me queda claro… — mencionó Aura cuándo la castaña la tomó de la mano para, ahora sí, ingresar al plantel.

—Bien, esto es todo lo que necesitamos… las materias, los horarios, el croquis del campus… y… — habló la castaña —… las llaves de nuestro dormitorio— finalizó emocionada lanzando y sujetando en el aire dicho objeto.

—Fue una suerte que nos tocara juntas… — dijo sonriendo la pelinegra mientras hojeaba su carpeta con sus horarios.

—¡Vaya se nota que te emociona tanto! — reclamó indignada.

—¿Has visto esto? — mencionó del mismo modo Aura.

—En realidad no… — dijo despreocupada.

—Vamos Kristel… a eso venimos… a estudiar, son muchas clases… — dijo con algo de preocupación.

—¿Y me lo dices tú, que vienes siguiendo a Jaden? — recordó la castaña mientras la veía con reproche.

—Bueno… sí, pero… también quería estudiar aquí…— aseguró Aura.

—Relájate, dicen que el primer año no es tan complicado…

—¿No es tan complicado? ... Historia del Análisis Económico, Finanzas Públicas, Desarrollo Económico, Probabilidad, Contabilidad, Inferencia Estadística, solo por mencionar algunas… ¿a eso le llamas no tan complicado? — enumeró unas materias de su listado.

—Ah cómo sea ... ¿para qué entrabas a Economía? Leyes no es tan complicado — respondió Kristel.

—Papá insistió… el futuro de la empresa, ya sabes. — dijo Aura con fastidio.

—Entonces no te quejes, no tenías de otra, pero mientras tanto ¡divirtámonos!, ya a su debido tiempo nos convertiremos en ratones de biblioteca si tú quieres. — pidió Kristel mientras se ponía frente a ella y la veía a los ojos.

Aura sonrió contagiada.

—Tienes razón… vayamos a ubicarnos y después dar una vuelta por el campus.

—¡Así se habla! ... o mejor a buscar a tu Jaden. — ambas chicas se sonrieron con complicidad.

En otro lugar del campus.

—¿Qué piensas hacer Jaden? — cuestionó divertido un joven ojiazul de una pequeña coleta.

—¿Qué demonios quieres que haga Erick?, hablar con ella… — dijo Jaden entre molesto y preocupado, ambos jóvenes se encontraban en uno de los vestidores del gimnasio de baloncesto.

—Hoy es su primer día, igual que Kristel, no quiero tener problemas con ella por tú culpa. — habló Erick ahora con cierto reproche.

—Ya sé… — mencionó Jaden con fastidio mientras se preparaban para su primer entrenamiento de ese nuevo semestre — Solo espero que me entienda, no es mi intención romper el compromiso, pero quiero divertirme primero antes de amarrarme, tu me entiendes, y Emireth es muy sexual y divertida, estaré con ella un tiempo y luego regresaré a Aura, ella deberá entenderlo. — terminó de decir.

—Seré realista y te pondré los pies en la tierra… — Erick se burló de su desgracia —Ninguna chica aceptará que "su futuro esposo" tenga otra novia. —

—Aura es mi prometida y la quiero…pero ella es demasiado dulce para jugar lo que a mi me gusta. Estoy seguro de que va a comprenderlo. —aclaró Jaden con cansancio.

—¿Entonces por qué estás tan preocupado? — cuestionó Erick irónicamente.

—Porque Aura, bueno, ella… — decía Jaden, efectivamente, preocupado.

—La quieres… — aseguró su compañero.

—Por supuesto que la quiero, Erick. — aceptó. — Aura me gusta, es muy bonita y también pensé en casarme con ella cuando nuestros padres lo mencionaron, pero de eso ha pasado mucho, no nos hemos visto más que un par de veces antes de que ella entrará a estudiar aquí… — dijo y se detuvo frustrado. — y ahora está Emireth.

—¿Y cómo reaccionó tu flamante novia Emireth a todo esto? — cuestionó Erick y en el tono usado demostraba que la susodicha no le caía del todo bien.

—¿Cómo crees? — cuestionó Jaden irónico y le aventó una pequeña toalla que siempre llevaban a la cancha, para limpiar el sudor. — se molestó, dijo que me daría solo el día de hoy para arreglarlo, anda molesta y celosa, cada vez que sale el tema de Aura ella me hace una de sus escenas.

—Vaya que es exigente. — se burló Erick.

—Cómo verás no tengo mucho tiempo… — dijo mientras se disponían a salir de los vestidores… —… quiero a Aura, pero por ahora no quiero dejar a Emireth…tú sabes que fue difícil que saliera conmigo. —

—Entonces dile a Aura que quieres a Emireth y deja que ella encuentre a alguien más… — aconsejó Erick estar a punto de salir.

—¡No digas estupideces! — Jaden se detuvo molesto. — no puedo perder a Aura. —

—¿Por qué?, ¿Por tu futuro económico? Aura es la hija del socio más importante de tu padre ¿solo por eso la quieres? — también Erick se molestó, él conocía a Aura, pues era la mejor amiga de Kristel, su novia, fue por ella que se conocieron.

—¡Por supuesto que no! — Jaden aseguró de inmediato. — es solo que Aura es…inocente, demasiado pura, y con ella no puedo tener lo que tengo con Emireth. — aceptó finalmente.

—Así que todo es por sexo. — dijo Erick irónicamente y en el fondo con algo de decepción.

—Soy hombre después de todo…— respondió Jaden.

—¿Y por qué no la conquistas? Seguro Aura no debería tener problema en iniciar una vida de pareja contigo… — dijo simplemente.

—Cómo si no la conocieras, Aura es de las que cree en llegar virgen al matrimonio… — dijo con fastidio.

—¿Entonces la dejarás ir? — cuestionó nuevamente Erick.

—¿Qué parte de esta conversación no has entendido? — preguntó Jaden irónicamente. —… estaré con Emireth el tiempo que sea necesario… pero al final, terminaré casándome con Aura. — mencionó seguro de las cosas.

—¿Y si te enamoras de Emireth?, ¿O si Aura se enamora de alguien más? — planteó las disyuntivas.

—Eso no va a pasar, Emireth me gusta, me atrae, pero es frívola, no es como si quisiera pasar con ella el resto de mi vida. —

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