Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 41 Propuestas inesperadas

—¡Cómo te atreves a responderme! —gritó Victoria.

Viendo que su esposa estaba lista para golpearlo de nuevo, Alexander rápidamente cubrió su rostro con ambas manos.

—Cariño, por favor, no me vuelvas a pegar. No podré mostrar mi cara en público.

—Inútil. ¡Lárgate! —espetó Victoria.

Alexander se d...