Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 128

—¡Melinda, no puedes escapar!— Lawrence ya estaba de pie y corriendo tras de mí.

Stella se aferraba a Lawrence, negándose a soltarlo. —¡No puedes irte! Si te vas, tienes que llevarme contigo. ¡No me dejes!

Lawrence, furioso, pateó a Stella al suelo con un fuerte golpe.

No me atreví a dudar ni un ...