Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 468

Christina, sensible al tacto, no pudo evitar soltar un gemido.

Giró su cintura, tratando de resistir, pero el cuerpo de Sebastián la inmovilizó firmemente en el asiento, dejándola sin poder moverse.

Desesperada, con todo su cuerpo temblando, instintivamente apretó las piernas, inmovilizando su muñ...