Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 169 Pretenciosidad

—¡No te detengas! ¡Sigue conduciendo!— gritó Sarah, su voz quebrándose por el pánico.

El conductor se estremeció pero no se atrevió a desobedecer. Apretó los dientes y pisó el acelerador a fondo, haciendo que el coche avanzara a toda velocidad.

Justo cuando Sarah empezaba a recuperar el aliento, v...