Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 108

Hannah

Las manos de Leonardo se cerraron inmediatamente sobre mis muslos, obligándolos a abrirse más. —¿Dije que podías cerrar las piernas?— Su voz era engañosamente suave, pero el acero debajo era inconfundible.

—Estamos en tu oficina— susurré, mirando nerviosamente hacia la puerta.

—¿Y?— Le...