Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO CUARENTA Y SIETE.

Me acerqué suavemente a mi mamá después de lo que parecieron horas.

—Deberías ir a casa e intentar descansar un poco —le sugerí—. Ya has pasado por mucho.

Mi mamá negó con la cabeza enfáticamente.

—No puedo irme. No hasta que sepamos que Celine está bien.

Persistí.

—Pero no servirás de nada a n...