Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 76. Miedo real.

Killian Deveraux

El silencio que siguió después de ese último beso fue más brutal que cualquier grito. No había música, no había bullicio de bar, no había carcajadas de fondo. Solo estaba ella, con el pecho subiendo y bajando rápido, con los labios hinchados, con los ojos verdes clavados en mí c...