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Entrega

Elena acarició las manos de Thiago que la sujetaban con fuerza, estaban en el despacho mirando por la ventana como Ava jugaba con su abuelo.

Ella miró la unión en sus manos, esa fuerza que había entre ellos dos, ese imán que los hacía sostenerse con intensidad.

El ambiente se sentía extraño, el he...