Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 124

Antes de que pudiéramos decir algo más, hubo un golpe en la puerta y escuchamos lo que sonaba como una estampida de elefantes gritando: —¡Yo abriré! —¡No, yo abriré!— discutían. —¿Qué tal si los dos abren?— gritó Marco. —¡De acuerdo, los dos abrimos!— gritaron Rebel y Ryder. Nos dirigimos a la puert...