Read with BonusRead with Bonus

50

No sabía cuánto tiempo había estado agachado junto a la panadería abandonada. Mis piernas estaban rígidas, me dolía la espalda y tenía la cabeza palpitando. Todo se sentía pesado—mi ropa, mis extremidades, mis pensamientos.

Ya estaba oscuro, probablemente alrededor de las siete u ocho. No podía est...