Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 122: Un nombre

Mi Gamma se movió rápido, agarrando los brazos de Eliza desde atrás. Ella luchaba contra él, el pánico en sus ojos.

—¿Dónde está el teléfono? —demandé, acercándome.

Sus ojos se abrieron de par en par—. ¿Q-qué teléfono? No sé de qué estás hablando.

—No me mientas —gruñí—, sé que tienes un teléfono...