Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 248

Comparado con mi estado de nerviosismo, Henry parecía mucho más sereno.

Sujeto firmemente la pelota de tenis entre su cuello y su hombro, caminando con paso firme hacia el cubo colocado en la mesa. Después de confirmar que podía soltarla de manera segura, dejó caer la pelota.

Rebotó dos veces, rod...