Read with BonusRead with Bonus

Culpa, flores y regresos

—¿Violeta? ¿Estás bien, qué pasa?

—Vi una cara —respondí sin abrir los ojos—. Me duele.

—Tranquila, respira… Respira despacio, no te asustes.

No era miedo, era dolor, pena, ganas de llorar que aparecieron de la nada. Y algo, un perfume más potente de flores que me hizo regresar por el pasillo.

—...