Read with BonusRead with Bonus

Una deuda de ancianos

Anoche fue la noche más hermosa que he pasado en mi vida.

Me desperté sintiendo el peso del brazo de Kaius sobre mi cintura, anclándome a esta nueva realidad—él era el Rey ahora, y de alguna manera, increíblemente, yo era su Reina.

Me giré con cuidado para mirarlo, estudiando sus rasgos en la suav...