Read with BonusRead with Bonus

Sus condiciones, su placer

Estaba en camino de regreso a la habitación de Frost cuando de repente sentí unas manos firmes cubriendo mi boca, un brazo rodeando mi cintura para arrastrarme a una habitación lateral vacía. Mi corazón se aceleró con pánico momentáneo antes de reconocer el aroma—rico, masculino e inconfundiblemente...