Read with BonusRead with Bonus

Capítulo NOVENTA Y SEIS

El silencio cayó y lo único que se podía escuchar eran las ondas del agua de la piscina.

Sebastián miró entre los dos, luego dijo —¿Quieren tomar algo?

—No —dijo ella enojada y tomó el botiquín para irse.

—¿A dónde vas? —gritó Sebastián, sacando un cigarrillo de su bolsillo.

—A la tienda.

—¿Por...