Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 48. Impotencia

Sebastián

El pasillo estaba en silencio, pero en mi cabeza todo era ruido. Cada paso que daba resonaba con eco. El eco de mis propios pensamientos. El eco de su nombre: Dakota.

Llevaba ya no sé cuánto tiempo caminando de un lado a otro. Mis piernas se movían solas, como si fueran lo único que ...