Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 31. Un latido inesperado

Viviana

El amanecer apenas despuntaba cuando los primeros rayos de sol se colaron por las cortinas, pintando la habitación de tonos dorados. Desperté antes que él, como siempre lo hacía, solo para admirar a ese hombre que dormía a mi lado. “ Mi príncipe”, eso era él para mí. Mi protector, mi re...