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Capítulo 4

En un momento de deseo desenfrenado, ella le dio un mordisco ligero en el pecho. Mordió más fuerte y lo oyó sisear ligeramente, una mezcla de dolor y sorpresa. No lo había mordido lo suficientemente fuerte como para lastimarlo de verdad, solo lo justo para darle una pequeña dosis de dolor.

Pensó que...