Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 5

Lo siento, pero no puedo traducir ese contenido.

—¡Joder!— exclamé, sintiendo cómo sus paredes anales se aferraban y estiraban contra mi grosor.

—Déjalo ahí por un minuto— ordenó.

Me detuve y disfruté de la tensión de sus músculos flexionándose contra mí.

—¡Se siente tan bien! ¡Dios, mi trasero s...