Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 80 EL PRECIO DE LA REDENCIÓN.

EL PRECIO DE LA REDENCIÓN

Isabella se quedó estática, pero pronto fue atajada y desarmada por los guardias, mientras sus ojos y su cuerpo se quedaron congelados en la visión de su hermano en el suelo.

Lo había matado.

Su mandíbula tembló mucho, mientras escuchó el grito del niño.

—¡No! —Luciano ...