Read with BonusRead with Bonus

Mientras tanto en la bodega

—¿Cómo es posible que hayas dejado escapar a esa mujer? ¿en que estabas pensando imbécil que no los dejaste bien atados? —Olivier enojado le especto al hombre, quien estaba demasiado golpeado

—Señor, me cogieron por sorpresa, se lograron desatar

—Son unos malditos inútiles, ahora no podemos ma...