




Capítulo 75.
Bianca parecía querer asesinar a Paul con la mirada, detestaba que él fuese el elegido por el tío Max, su marido siempre había demostrado ser tan débil, tan poca cosa ante sus ojos, que encontrarse ahora con una noticia cómo esta, definitivamente la llenaba de rabia.
—felicidades Paul, todos hablan de tu inteligencia, y si papá confío en ti, seguramente es porque tienes la capacidad para poder representar el corporativo —dijo Carolina.
—Es un honor que alguien como usted me diga algo así, Carolina, se de sus antecedentes dentro del corporativo, todos la admiraban muchísimo, ojalá algún día se decida a regresar —contestó en forma genuina.
—por ahora no pienso en eso, pero más adelante quizá lo haga, siempre me apasionaron los negocios, pero por ahora mi hija es mi prioridad —señaló.
—claro, cariño, las madres haríamos cualquier cosa por nuestros hijos —intervino la calculadora Úrsula que estaba pendiente de todos los detalles.
—felicitaciones, Paul, llevar las riendas de un corporativo no es nada sencillo, pero cuando llevamos a cabo nuestra tarea con honradez y eficiencia se siente una gran satisfacción —añadió Maximilien un tanto desconfiado por los antecedentes que tenía de esa familia.
—muchas gracias, señor Baker, conozco su trayectoria y sus consejos sin duda los tomaré muy en cuenta —respondió.
Todos se desvivían en halagos y felicitaciones para el nuevo director del corporativo, lo cual a Bianca no le hacía mucha gracia, por lo que no perdió la oportunidad de lanzar uno de esos comentarios ácidos que ella acostumbraba cuando pretendía hacer sentir mal a alguien.
—en efecto, Paul es muy inteligente, pero bastante inestable, espero que no te canses rápidamente de tantas responsabilidades, cariño —vociferó maliciosamente.
—claro que no, querida , si no me he cansado de este matrimonio, mucho menos me cansaré de algo qué me gusta tanto —contraatacó.
Se produjo un silencio incómodo, para nadie era un secreto que la relación entre Paul y Bianca no era más que un espejismo, ella nunca lo quiso y eso era un secreto a voces, pero Úrsula no podía permitir que su hija y su yerno quedarán expuestos ante los demás, así que en su intento de salvar la situación, intervino.
—Ay, estos jóvenes, seguro tuvieron alguna pelea de esas que acostumbran por cualquier tontería y por eso están convirtiendo esta mesa en un campo de batalla, pero no debemos hacerles caso, claro que a mi hija le alegra la noticia de qué mi yerno vaya a ser el nuevo director del corporativo, ¿no es así cariño? —Le pregunta a propósito.
—por supuesto, sólo estaba bromeando, mi marido ya me conoce —se obligó a mentir.
Por supuesto que nadie se tragó el cuento de lo que estaban diciendo, pues sus palabras decían una cosa y sus gestos otra completamente diferente, no obstante, era asunto suyo y ellos no deseaban para nada intervenir en cosas que no eran de su incumbencia. La cena terminó y era momento de las despedidas, Úrsula y Bianca eran expertas en interpretar el papel de la familia abnegada, así que falsamente les desearon lo mejor, pero se veía a leguas el odio que le tenían a Helena y a Carolina por su posición dentro de la familia Adams. Por otra parte, Diana estaba recibiendo los estragos de la ruptura con los Baker, su familia ya no tenía tanto dinero y sus privilegios empezaron a verse seriamente afectados.
—Mamá, fui al centro comercial y pasé mi tarjeta, y me dijeron que no tenía fondos, pasé una vergüenza terrible delante de mis amigas, así que quiero que vayas a pagarlas inmediatamente —exigió.
—lo siento, hija pero tendrás que arreglártelas tú sola, en este momento la empresa está pasando por un momento terrible debido a la ruptura de la sociedad con los Baker, si al menos hubiese sido más inteligente, ahora lo tendrías comiendo de tu mano y nosotros no tendríamos por qué estar atravesando por esta situación —contestó su madre llena de rabia.
—Deja de culparme por todo, siempre han dejado las cosas en mis manos y ya estoy harta, de aquí en adelante los que tendrán que arreglárselas solos serán ustedes, porque yo procuraré por mi futuro —dijo con determinación.
—ingrata, después de qué te dimos todo simplemente sales corriendo y nos abandonas, pero así te va a ir en la vida, de mí te acuerdas malagradecida —vociferó la mujer.
Diana salió de casa de sus padres y se dirigió a su departamento, al menos tenía ese lugar para vivir, no le quedaba otro remedio que vender sus joyas, esos bienes tan preciados para ella, y tan importantes para aparentar delante de la sociedad. Se dirigió a una prestigiosa joyería, pero no sin antes disfrazarse un poco para que nadie la reconociera, pues sería bochornoso tener que pasar por esa vergüenza delante de la gente que la consideraba una muchacha de familia. Llegó al mostrador y expuso su caso.
—señorita, necesito vender este collar, ya no me gusta y prefiero obtener algunos fondos por el —mintió.
—entiendo, permítame un momento, veamos cuánto le ofrecen —contestó la encargada del lugar.
Elena también se encontraba en el establecimiento, y presenció toda la escena, y por supuesto no perdió la oportunidad para burlarse de esa mujer que en repetidas ocasiones la había humillado.
—vaya vaya, me parece increíble que la poderosa Diana esté vendiendo sus joyas, se nota que tu familia está en bancarrota después de qué Maximilien te votara a la basura como un trapo sucio —se burló Elena.
—estoy segura que nada te gustaría más, pero no, simplemente me deshago de una joya que ya no me interesa —contesta tratando de seguir con las apariencias.
—sí, claro, sigue fingiendo, pero la única que puedes engañar es a ti misma, porque lo que es a mí, no puedes —.
Elena sacó su tarjeta de crédito, una tarjeta ilimitada que Gregory había puesto en sus manos para que pudiera comprar todo lo que quisiera, y se llevó las joyas más exquisitas del lugar, y luego se marchó ante la mirada atónita y furiosa de Elena. Un rato después la dependiente del lugar llegó para entregarle la cantidad que le ofrecían, pero se quedó estupefacta cuando le dijeron de cuánto se trataba.
—¿Usted se está burlando de mi verdad?, Esta joya vale más del doble, no me quiera venir a ver la cara de idiota —espetó.
—Es lo único que podemos ofrecerle, señorita, lo siento mucho si eso no es lo que esperaba —.
Trato de respirar profundo, sabía que no tenía más alternativa que aceptar el dinero que le ofrecían, pues se había quedado sin nada, y sus padres ya no querían ayudarla, así que tomó el dinero de mala gana y se marchó del lugar completamente destrozada por todas las situaciones qué estaba viviendo a causa de los Baker.
—Maldito Maximilien, te juro que te vas a arrepentir por todo el daño que me estás haciendo, tú y tu maldita Helena se arrepentirán por esas humillaciones que acabo de pasar —pensó en voz alta.
Las cosas no estarían nada fáciles para Maximilien y Helena , ahora sus enemigos estarían más presentes que nunca, tratando de encontrar la manera de destruirlos y acabar con su felicidad, por lo que ellos debían tener cuidado y estar más unidos que nunca. El avión estaba a punto de despegar, toda la familia se trasladaría a la ciudad donde su nieta vivía, una nueva etapa estaba comenzando para todos ellos, y esperaban qué la dicha pudieras sonreírles por fin.
—así me gusta verte, radiante y feliz, eso te hace lucir mucho más hermosa —dijo Maximilien con voz seductora.
—y cuando me miras así, sabes que pones de cabeza todo mi mundo —añadió.
—siempre voy a mirarte como mi príncipe de cuento, eres el más guapo, el más lindo, estoy muy feliz, amor, y me encanta que estemos compartiendo todo esto juntos —contestó ella.
Él no puede dejar de verla, lo tiene obnubilado con su belleza , el embarazo le da un aire tan especial que definitivamente lo cautiva por completo.
—Eres maravillosa, Helena , no puedo vivir sin ti, tú eres el centro de mi mundo, el aire que respiro, y ahora que nuestros hijos estén con nosotros, la felicidad será perfecta —exclamó.
Seguido de sus palabras vinieron una serie de besos apasionados, para ellos no existía ni el tiempo ni el lugar cuando se trataba de demostrarse cuando se amaban, no obstante, el destino no estaba escrito, y muchas cosas podrían ocurrir, por lo que su amor debería ser aprueba de todo si es qué deseaban permanecer juntos para siempre como en los cuentos de hadas.