Read with BonusRead with Bonus

65. Un mundo sin felicidad

Esto no podía ser. No puede conseguir alguna razón para esto.

—No puedo creerlo —María Teresa la toma entre sus manos—. ¿Cómo es posible que tenga mi cadena? La tenía en el pueblo, en el convento. La monja que me crió la tenía.

—La verdad es que no lo entiendo. María Teresa, pero tienes una im...