Read with BonusRead with Bonus

32

MACARENA

Me levanté y me paré frente a él, sin embargo, siguió moviéndose, aparentando que algo hacía.

―¿Qué pasó?

―Nada, ¿por?

―No me digas que nada, no eres mujer para usar ese recurso.

Se quedó quieto y me dedicó una enorme sonrisa falsa.

―Nada, querida, no pasa nada.

Se iba a dar la...