Read with BonusRead with Bonus

26

MACARENA

―Friolenta ―susurró antes de que me abriera la puerta.

―Hace frío ―me quejé.

Él me dio un beso en la frente y me hizo subir.

―Deberías manejar ―me dijo al echar a andar su auto―, así no tendría que manejar yo todo el tiempo.

―No, yo no manejo.

―Deberías aprender.

―Sé, pero no m...