Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 24

Ya no tenía voz de tanto gritar. Lloraba aterrada, mi cuerpo temblaba sin control, y me dolía el pecho como si me lo estuvieran oprimiendo. De repente, la puerta se abrió de golpe.

Mamá cayó de rodillas y me abrazó con fuerza, envolviéndome en sus brazos como cuando era pequeña. Sus manos acari...