Read with BonusRead with Bonus

UN PÉSIMO PADRE

Armando Fernández

Apenas entro a la empresa a las nueve de la mañana, Alejandra me avisa que debo llamar a José Luis.

Tengo dolor de cabeza y estoy resfriado por caminar bajo la lluvia

Lo llamo de inmediato —Hola, ¿Qué necesitas?— Le pregunto.

—Te he estado llamando toda la mañana ¿Dónde estabas...