Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 44. ELLA AÚN TIENE A MATTEO EN SU CORAZÓN.

Gálata lo observó y su cuerpo se tensó, quiso retroceder, pero él se puso en la puerta del balcón para impedir su huida.

—Sí ¡Soy yo! El mismo por el cual has tenido tantas noches de insomnio. ¿Me extrañaste? Sé sincera contigo misma y no te lo niegues o ¿Vas a tener el valor desmentirme? —preguntó...