Read with BonusRead with Bonus

CADA QUIEN TIENE SU GUSTO

De nuevo el juego de las miradas, con el que se decían miles de palabras sin hablar. El lenguaje tácito corporal, las pequeñas sonrisas, las manos disimuladas en el cabello o en los brazos, los movimientos leves, la mágica sensación de crear una tensión invisible en el aire que los comunicaba. A Dan...