Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 44

—Tu renunciaste —le recuerdo para arruinar su teatro— y no me bebí el té, así que no cuenta.

—Shhh —se ríe.

—¿Y para que querías unos colmillos que botan sangre falsa?

—Es algo que Damon y yo queremos usar y que tus inocentes no tan inocentes oídos no deberían escuchar.

Rodé mis ojos y luego reímos ...