Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 42

—No mucho… —Se alivia—. Pero si lo suficiente. —La asusto.

—No hablábamos de ti —dijo nerviosa.

—¿Ah no? —susurre a su oído al pegarme a su cuerpo.

—Creí que estabas cansado y tenías sueño —supone ella con el ceño fruncido.

—De repente me siento con energía —me encogí de hombros—, además, tómalo com...