Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 26 (3)

Pero soy más que capaz de manejar a Timothy Adams. Así que apoyo mi cabeza contra su pecho y cierro los ojos. El bajo del club pulsa a través de mis talones. La música retumbante ahoga todo entre nosotros, sacudiendo el dolor y los sentimientos hasta que no queda espacio para nada más que este momen...