Read with BonusRead with Bonus

14

A medida que continuábamos nuestro viaje hacia el templo, el aire se volvía denso con tensión. Cuanto más nos acercábamos, más parecía cambiar el entorno a nuestro alrededor. Las montañas, antes escarpadas, daban paso a árboles extraños y retorcidos y a una maleza densa que se sentía casi antinatura...