Read with BonusRead with Bonus

Capítulo veintidós

El fin de semana había pasado, pero el recuerdo del beso de Elijah seguía rondando en mi mente como una picazón molesta que no podía rascar. No importaba cuántas veces me dijera a mí misma que lo dejara ir, seguía regresando, repitiéndose en bucle cada vez que tenía un momento de tranquilidad.

Cuan...