Read with BonusRead with Bonus

Capítulo ciento dieciséis

La mañana pasó en un abrir y cerrar de ojos mientras hacíamos el check-out del hotel, recogiendo nuestras cosas antes de dirigirnos al coche. La adrenalina de la noche anterior se había desvanecido, dejando un silencio inquietante entre nosotros. Pero no había tiempo para demorarse. Teníamos un dest...