Read with BonusRead with Bonus

20

A medida que la noche avanzaba, ambos continuaron durmiendo en esa posición incómoda pero reconfortante. El amanecer asomó por las ventanas, iluminando la habitación con una luz tenue y cálida. Entre sueños, Celine sintió el movimiento de Enzo a su lado y, con su mano aún apoyada en su abdomen, se a...