Por fin lo veo
Elona’s POV
Los rayos dorados del sol de la tarde se filtraban a través de los altos árboles que bordeaban la calle mientras caminaba por el camino familiar hacia la casa de Crislynn. Crislynn ha sido mi mejor amiga desde que teníamos seis años. Compartimos la misma calle, y ellos fueron muy acogedores cuando mi padre y yo nos mudamos aquí en aquel entonces. Era un vecindario lujoso, pero las fachadas relucientes de las mansiones no eran nada comparadas con los sueños que se gestaban dentro de nosotras. Con el corazón acelerado, me acerqué a la casa familiar con su elegante arquitectura y su bien cuidado jardín. Levanté la mano para llamar a la puerta, con mariposas revoloteando en mi estómago.
La puerta se abrió de golpe y reveló a Crislynn, su cabello castaño rojizo cayendo en ondas alrededor de sus hombros. Sus brillantes ojos verdes tenían un toque de travesura mientras me sonreía.
—Elona, llegas justo a tiempo. ¡Entra!
Nos acomodamos en la cocina. Me senté en el taburete del mostrador de la cocina mientras Crislynn nos servía jugo de uva. Estamos en nuestro último año de secundaria. Aún estamos por embarcarnos en un nuevo capítulo de nuestras vidas el próximo año.
—Mi papá se fue a unas reuniones, así que estaba aburrida —dije mientras ella colocaba el jugo de uva frente a mí. Mi papá se dedica a los bienes raíces, pero siempre estoy agradecida por el tiempo que aún se toma para estar conmigo. Tenemos una gran relación de padre e hija que no quiero romper nunca.
—Estaba investigando sobre universidades a las que asistir —dijo mientras guardaba el jugo en la nevera y luego se volvía hacia mí—. Es muy difícil elegir a qué universidad aplicar. El periodismo es mi sueño, y no quiero dejar a mi papá aquí. Me preocupa —dijo con un toque de preocupación.
Sentí pena por ella, también era cercana a su padre. Cuando me mudé aquí, tuve el privilegio de conocer a su mamá, Estelle. Crislynn se parecía a su madre, pero tenía los ojos verde bosque de su padre. Su madre falleció hace tres años, y ha sido difícil para ambos. Mi madre falleció cuando yo tenía cinco años y en este momento no quería ni pensar en eso porque se suponía que debía animar a mi mejor amiga.
—Estoy segura de que él querría que vivieras tu vida y te divirtieras —le sonreí débilmente.
—Has visto cómo se sumerge en el trabajo y sugeriría que empezara a salir de nuevo, pero dudo mucho que lo haga —dejó escapar un suspiro pesado.
—Es su elección después de todo —tomé un sorbo de mi jugo. Debo admitir que tengo un pequeño enamoramiento con el Sr. Crane, pero no lo suficiente como para querer realmente perseguirlo.
—Supongo que tienes razón —dijo.
—He estado pensando en algo que podría seguir como posible carrera —dije mientras mantenía mi mano en el vaso.
—¡Por favor, cuéntamelo! —siempre estaba tan ansiosa por saber.
Sonreí nerviosamente.
—Bueno, he estado pensando mucho en mi futuro últimamente. Quiero seguir una carrera en el modelaje.
Los ojos de Crislynn se abrieron, una mezcla de sorpresa y emoción.
—¡Wow, Elona! —estaba asombrada—. Tienes el aspecto y la confianza para ello, sin duda. Pero aún eres tímida de alguna manera.
No pude evitar sonrojarme ante sus palabras.
—Gracias, Crislynn. Es solo que he estado investigando agencias y hablando con personas, y realmente creo que puedo lograrlo. Nunca lo sabré si no lo intento y tal vez esa timidez desaparezca. Aún lo estoy pensando, pero por ahora, por favor no le digas a nadie hasta que haya tomado una decisión y haya hablado con mi padre al respecto.
La sonrisa de Crislynn se ensanchó.
—Lo prometo, no le diré a nadie. No tengo dudas de que serás genial, Elona. Y me tendrás animándote en cada paso del camino.
—Eso significa mucho y sabes que haré lo mismo por ti —sonreí.
—Por supuesto. Ahora, solo falta que mi papá vuelva al campo de las citas —dijo. Oímos la puerta principal abrirse y cerrarse, y supe quién era. Mi corazón latía salvajemente en mi pecho ante esta repentina sensación de nervios y emoción.
De repente, me tensé cuando escuché la voz del Sr. Crane detrás de mí.
—Buenas tardes, chicas —dijo, y Crislynn le sonrió por encima de mi hombro.
—Hola, papá. Llegaste bastante temprano —dijo. El Sr. Crane apareció a mi lado mientras lo vislumbraba. El Sr. Crane era innegablemente atractivo, con rasgos afilados y un carisma que parecía irradiar sin esfuerzo. Era como si estuviera acostumbrado a ser el centro de atención, incluso dentro de las paredes de su propia casa.
—¿Cómo estás, Elona? —me miró con esos ojos verde bosque que a veces me persiguen en mis sueños. Aclaré mi garganta.
—Estoy bien, Sr. Crane —sonreí y miré hacia mi jugo. Sentía el calor que subía a mis mejillas. Nunca me había sentido así a este nivel antes.
—Eso es bueno saberlo —respondió, y su voz era muy aterciopelada—. ¿Has estado investigando a qué universidad quieres aplicar? —le preguntó a Crislynn mientras iba al armario y alcanzaba un vaso en la parte superior. Observé sus músculos delgados a través de su traje negro de tres piezas de Armani. Eso tampoco me ayudó.
—Sí, he estado mirando, pero también tenemos tarea. Tenemos que escribir un ensayo. ¿Está bien si Elona se queda a cenar? Su padre está en reuniones y es viernes por la noche. Puedo pedir pizza para nosotras —dijo.
Cuando mis ojos encontraron al Sr. Crane de nuevo, estaba bebiendo agua de su vaso mientras me miraba intensamente hasta que dejó de beber.
—Está bien para mí, mientras tanto, tengo algo de trabajo que ponerme al día en el estudio —dijo mientras se daba la vuelta, colocaba el vaso vacío en el fregadero y se alejaba.
Mi corazón se aceleró, y por primera vez, lo vi verdaderamente, no solo como el papá de Crislynn, sino como un hombre. Y cuando sus ojos se encontraron con los míos por un momento fugaz, me di cuenta con un sobresalto de que mi pequeño enamoramiento por él era mucho más que solo eso.