Read with BonusRead with Bonus

15

Pero ahora todo el desequilibrio del mundo la acompañaba. Nada volvería a su sitio, porque ya nada de eso existía. Ni siquiera su propio lugar.

Volvió a ponerse nostálgica, recurriendo al llanto potente, lo único seguro esos días.

...

Al cabo de un tiempo, Rashid había terminado de empacar dos va...