Read with BonusRead with Bonus

Cabalga de un extraño

La lluvia es implacable, cada gota más gorda que la anterior.

Al menos el agua está tibia, el olor a tierra flotando a mi alrededor. Nada de eso es reconfortante mientras camino por la carretera casi vacía. Solo unos pocos coches han pasado zumbando junto a mí, ninguno prestándome atención.

El res...