Read with BonusRead with Bonus

CAPITULO 40

Rubí se vistió y se quedó acostada unos momentos en su cama recordando lo que sucedió, los labios llenos de lujuria del comandante acariciando los suyos, ese beso tan candente que la hizo estremecer algo que solo había sentido con Alexander

Y lo que le confesó «estoy enamorado de usted», esas palab...