Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 345 Dos bastardos

Justo cuando estábamos charlando, David salió del ascensor. Se veía totalmente exhausto, con ojeras marcadas bajo los ojos.

—Diana, ¿qué está pasando? ¿Por qué necesitabas verme con tanta urgencia? —preguntó.

—Hablemos en mi oficina —dijo, llevándome allí.

En la oficina minimalista de David, le c...