Read with BonusRead with Bonus

Poseído por el mismísimo diablo

—¡Mi mujer no haría algo así! Deja de ser una maldita interrupción, acepta el rechazo, acepta que ella no te quiere en su vida

—¡No lo aceptó! Ella es para mí y así será, además, no se han casado, y si no me crees sobre el poder que ella me dió, aquí tengo una copia, si la quieres destruir es tu pro...