Read with BonusRead with Bonus

El tiempo es sorpresivo

—¡Buen día querida amiga!— Myriam bosteza y se acerca al sillón, dónde toma asiento para poder disfrutar de su taza de café

—por lo visto has dormido bien— Ada le acompaña

—Estoy feliz de tener trabajo. Espero que él señor Grey no me ponga a limpiar pisos— tomó un sorbo de su café

—descuida...— susp...